jueves, 30 de octubre de 2008

Sentido del humor

Entré en el que reconozco como "mi" colegio, ese colegio que marcó en cierta forma mi vida y mi educación, a la edad de 8 años.
Hasta aquel momento, había asistido con mis hermanos al colegio al que había acudido mi madre, con el que ella mantenía una relación especial, y que se encontraba en un barrio de mucho dinero de Madrid, alejado de mi hogar, por lo que mis compañeros eran todos niños bien con casas estratosféricas.
Pero me llevo muchos años con mis hermanos, y aprovechando que todos cambiaban más o menos de ciclo y ya no iban a estar en ese colegio conmigo, me cambiaron a uno mucho más cercano de casa, también algo pijillo, pero nada en comparación.

Mi colegio es pequeño, aunque bien aprovechado. Y no sé como estarán ahora las cosas, pero era un extraño colegio de ideas izquierdosas metido con calzador en un barrio de clase media alta madrileño. Un local alquilado a una parroquia aunque dirigido lo más laicamente posible, con profesores que tenían ideas y educaban a su manera, buscando incentivos atractivos para los alumnos. Y con muchísima educación en valores, trabajando intensamente el respeto a los demás tanto como a uno mismo.

En ese ambiente conocí a los que aun hoy en día son el núcleo fuerte de mi grupo de amigos. Un conjunto de personas con los que llevo vividas mas de 2/3 partes de mi vida y con los que mantengo una relación casi familiar. Y un núcleo en el que se ha forjado nuestro sentido del humor, convirtiéndolo en una característica propia de cada uno de nosotros, hasta tal punto que lo reconocemos indudablemente y lo hemos bautizado, dándole el nombre de nuestro antiguo colegio.

Nuestro sentido del humor es característico hasta el punto de haber resultado incomprendidos en muchas ocasiones. Para gente con más picardía resulta en exceso naif, y para muchos es a veces demasiado absurdo y sin sentido como para tener gracia. De hecho, antaño, cuando nuestro grupo de amigos se juntaba con otros grupos, con eso de los apoyos gregarios y el no comprendernos de primeras, a veces resultábamos de difícil integración. Pero a la hora de tratar con individuos separados la verdad es que, poco a poco, hemos ido convirtiendo a la gente que se nos ha ido acercando, hasta el punto de que es difícil permanecer con nosotros durante unos días sin acabar entrando en el juego de nuestras gracias. Y como una de sus principales características es no resultar en absoluto ofensivo, a nadie le duele incorporarlo como propio.

Básicamente nuestro humor se basa en lo que se basa casi todo el humor, contextualizar y descontextualizar. Pero lo hemos llevado al extremo, y siempre manteniendo un alto grado de respeto por la gente que nos rodeaba, por lo que también suele resultar más surreal y absurdo que malicioso.
En sus inicios, cuando eramos unos casi preadolescentes, todo se basaba en juegos de palabras, que se convertían en otras para establecer chascarrillos. Pero eso llevó muy pronto a juegos más complicados en los que constantemente, entremezcladas en conversaciones absolutamente serias, se ofrecen combinaciones de palabras con varios posibles significados para que el interlocutor responda con su propio ingenio. Podemos sacar punta a las frases más ingenuas para darles totalmente la vuelta. Y lo cierto es que hemos desarrollado el arte hasta el punto de poder sacar de quicio las palabras de los demás y retorcerlas construyendo verdaderas historietas surrealistas que muchas veces no contienen más gracia que la que a nosotros nos ha producido crearlas.
Aunque claro, dentro de la endogamia que auna nuestro grupo, a todos nos parece gracioso...

Evidentemente, en el grupo hay individuos más ingeniosos y menos ingeniosos. El más ingenioso se dedica a ser humorista (lo cual en cierta forma es una especie de éxito colectivo) y en el otro extremo yo, por ejemplo, me desquito escribiendo mi blog. Pero quien más y quien menos tiene sus momentos de gloria, y todos sabemos entendernos cuando alguno hace algún juego de palabras o un doble sentido, por retorcido que resulte. Y es habitual que, al emplear uno especialmente revirado, haya personas de las que nos han disfrutado menos que no se enteren y necesiten que se les explique.

Por poner un ejemplo para que entendáis a que me refiero y os hagáis una idea más clara, os contaré una anécdota que vivimos en mi pasado viaje a Dublín de septiembre (y contaré algo que dije yo, para no poner en ridículo a nadie más). Estando de excursión, montados los siete viajeros en un coche, se me ocurrió decir que aquel pueblo al que íbamos lo habían llamado así cuando le preguntaron a su único habitante como se encontraba, y éste había respondido: "Débil, bajo...". Todos los que estaban allí entendieron el juego de palabras con solo decir aquello, excepto la novia de un amigo mío, que solo nos conoce desde hace un año y medio y, pese a ser una tía inteligente, aun le cuesta coger tonterías tan estúpidas. Y como la broma era mala se recogió con cierto silencio de indiferencia y asunción de la tontería, excepto ella, que le preguntó a su novio a cuento de qué había venido aquello.
El nombre del pueblo era "Wicklow". "Weak" + "low", débil y bajo, "Wicklow".
Una idiotez, por supuesto, pero una idiotez para cuya comprensión has de descomponer el nombre en inglés, transcribirlo fonéticamente, traducirlo al español y aplicarlo a lo contado.

Lo normal es que nadie se tome tantas molestias por una idiotez, pero lo cierto es que en mi grupo de amigos nuestros cerebros ya funcionan así, ese tipo de cosas nos salen solas. Y lo habitual es que si esa idiotez es buena produzca un montón de contestaciones idiotas que sean aun más retorcidas y acaben creando una realidad propia en la que un conjunto de leprechauns rosas se contoneen en un río bailando el "Macarena". Evidentemente mi idiotez no era tan buena...

Después de todo esto que os he contado hoy es más que probable que alguno empiece a creer que mi grupo de amigos y yo salimos de un colegio de estos de educación especial, y que de ahí ese tipo de humor con su nombre honorífico. Y no negaré que es un sentido del humor no solo diferente sino incluso distintivo.
Pero he de confesar que es algo de lo que sobre todo me siento orgulloso. No solo porque es un rasgo fundamental de un grupo de personas de las que me honra ser parte, sino porque además nos ha obligado a ejercer una flexibilidad a la hora de conversar entre nosotros que nos ha hecho bastante ágiles de mente. Y porque es el tipo de cosas que me hace desear estar con mis amigos cuando tengo ocasión.
Y a riesgo de ser demasiado endogámico e ignorar que todo grupo tiene sus claves y sus ritos que les convierte en algo especial, me quedo con mi sentido del humor y toda mi estupidez, si es con ellos con quienes los voy a disfrutar, y con el sentimiento de que, de verdad, es algo especial.

Hoy va por mis amigos, por los más viejos pero también por los más nuevos (como los recién casados de mi último viaje), incluso por los recién llegados (como el pequeño Marcos, que nació ayer). Nos vemos...

miércoles, 29 de octubre de 2008

De vuelta.

Pues eso, que ya he regresado, pero que ando algo liado como para ponerme a hacer un post del viaje por ahora. Caerá, pero habrá que dejarlo para la próxima semana.

Mañana ya pondré algo más en serio; necesito un poco de tiempo para detenerme y respirar, y además ando físicamente tocado, congestionado y con toses.
Por ahora solo puedo decir que fue una boda estupenda, con gente estupenda en un lugar estupendo. Y que la vuelta me tocó hacerla en Business gracias al overbooking y a una asistente de tierra Bárbara, que no solo lo estaba sino que se llamaba así.

Gracias a los que estáis ahí incluso cuando no hay nada que leer, vuelvo en unas horas...

miércoles, 22 de octubre de 2008

De boda...

Este fin de semana va a empezar muy pronto para mí. Esta misma tarde, en concreto.
Me voy mañana de viaje, lejos de aquí, a otra ciudad de otro país en la que se celebrará la boda de un buen amigo... Y no volveré hasta el próximo lunes por la noche.
Así que no voy a publicar nada hasta mediados de la semana que viene, ya os diré que tal se da todo (se prevee un sí de la novia).

Supongo que el resumen de mi visita no llegará hasta algo después, cuando quiera que pueda descargar las cientos de fotos que pretendo hacer y haya seleccionado las mejores. Pero espero que merezcan la pena la espera.

Disfrutad vuestro fin de semana tanto como espero disfrutar el mío, sed muy felices y nos vemos en unos días... En serio, sedme buenos, no hundáis la economía mundial ni provoquéis muchos terremotos.
¡¡¡Y acordaos de cambiar la hora el domingo!!!

Ciao...

martes, 21 de octubre de 2008

Niños y obispos.

La semana pasada apareció en todos los periódicos la noticia de que había nacido en España el primer niño seleccionado para poder actuar como donante para su hermano, otro niño que sufre una enfermedad genética transmitida por sus padres y cuya esperanza y calidad de vida se ve extremadamente mermada por ello.

Y, como era tristemente de esperar, la Conferencia Episcopal Española ya ha mostrado su desacuerdo con la técnica de selección embrionaria utilizada, diciendo que con ella se ha destruido la vida de los hermanos del recién nacido. Asumen de nuevo su planteamiento como el único moralmente defendible, y pasan por alto que esa selección embrionaria ha facilitado el nacimiento de un niño sano y la curación de su hermano, desacreditando además a los que lo consideramos positivo diciendo que "los planteamientos emotivos encaminados a justificar estas prácticas horrendas son inaceptables".


Convencer a un creyente en un dios creador y normativo de que distintas visiones morales son posibles y no por ello menos correctas, es por defecto una contradicción.
Para los obispos, mensajeros de la palabra revelada, el bien emana de Dios (con mayúsculas aquí, al ser el "único"), y es por tanto algo definido, aunque los seres humanos a veces nos desboquemos. Y ellos, como transmisores de esa palabra, son los más indicados para establecer esos juicios morales. Si alguien no sigue el postulado, actúa mal. E imagino que si alguien actúa mal a sabiendas, ese alguien será un ser malo... Sigan el razonamiento para saber qué son ustedes mismos.

En el caso de la ciencia, el debate ético sobre el alcance y los límites morales de sus avances es muy interesante. Esta claro que hay pasos que nos sitúan muy cerca de los límites que la mayoría nos hemos dado para convivir. Y que, dentro de las creencias y valores de cada uno, hay avances que pueden resultarnos excesivos.
Pero cuando se intenta definir la verdad en función de la cual se hacen los juicios, como si fuese una verdad objetiva emanada de un ser superior, corremos el riesgo de equivocarnos de pleno. Porque corremos el riesgo de que ese ser superior no exista. O de que exista y no hayamos sabido escucharle bien; igual está por ahí en algún lado, llorando por lo que algunos hacen en su nombre.
Por eso es muy importante que las leyes otorguen marcos de convivencia asumibles por los miembros de la sociedad. Y que unos y otros respetemos esos límites y no nos inmiscuyamos en las vidas privadas de los demás, sus creencias y sus valores, siempre y cuando esa privacidad no viole esas leyes y límites autoimpuestos.

Yo me siento atacado por la Conferencia Episcopal Española, que cuidándose mucho de no usar la palabra asesinato, juzga que "el nacimiento de una persona humana ha venido acompañado de la destrucción de otras", e intenta decirme qué debo creer y qué hago bien o hago mal, empleando todo su poder (el terrenal, me refiero) para presionar y crear corrientes de opinión en el sentido de sus ideas.
Más allá de que mis conocimientos biológicos me ayuden a tener claro que es una "persona humana" desde un punto de vista científico (en la foto os pongo lo que son 8 personas humanas para los obispos) y más allá de lo que haya podido profundizar en el conocimiento de la filosofía y la ética para juzgar este tema con suficiente perspectiva, le pido a la Conferencia Episcopal Española que no trate "de recordar los principios éticos objetivos que tutelan la dignidad de todo ser humano".
Porque ni acepto ni tengo porqué aceptar esa supuesta objetividad ética y porque, siendo así, ese recordatorio no solo es un injusto juicio de valor, sino un velado ataque a mi libertad personal de decisión.

Como cualquiera, los obispos pueden opinar. Pero por favor, que dirijan sus especulaciones hacia sus feligreses, y no sojuzguen a todo un espectro de personas que no asumen sus postulados. Y sobre todo, que no emitan sus opiniones como si fuesen parte de "la verdad". Porque, por mucho que la deseen, en realidad solo creen fielmente en ella, pero no la conocen.

lunes, 20 de octubre de 2008

La inteligencia de los idiotas.

La película escogida este fin de semana fue (redoble de tambores)... "Quemar después de leer", la última de los Coen. Una comedia de idiotas y espionaje, de estúpidos en servicios de inteligencia y sobornos, escrita y dirigida con su habitual ingenio por los hermanos que llevaron al Oscar al amigo Bardem.

Tenía muchas ganas de verla, pues los Coen son de esos pocos a los que procuro ver siempre que estrenan algo. Su visión personal del mundo es de las escasas que pueden considerarse verdaderamente diferentes en el mundo de Hollywood, y varias de sus películas están clasificadas en mi memoria como obras geniales de revisionado imprescindible. Por no decir que, entre mis amigos, "El Gran Lebowski" está considerada a un nivel cercano a como lo está la Biblia en El Vaticano...

Bueno, pues una vez más salí del cine plenamente satisfecho y con el buen sabor de boca de haber recibido una magnífica dosis de originalidad y buen hacer, casi casi con la idea de volver a verla pronto para saborear de nuevo algunas de sus escenas. En concreto algunas ambientadas en la embajada de Rusia, o las de los despachos de la CIA...

Los Coen bordan un estilo de humor muy propio que reside entre lo absurdo, lo negro y, curiosamente, lo naif. Muchas de sus mejores películas hacen gala de él, como "Arizona Baby", "Fargo" o la misma "El Gran Lebowski". Y en esta película lo vuelven a recuperar tras el violento paso de "No es país para viejos", sacando a relucir su habitual pléyade de personajes estrafalarios. Lo hacen tirando de varios miembros de su troupe de amiguetes y cercanos (George Clooney y Frances McDormand), y complementándolos magníficamente por algunos otros que también resultan geniales (John Malkovich, Brad Pitt o Tilda Swinton). Un reparto que llama la atención por sus nombres y convence por su trabajo.

Pero lo más destacable para mí de la película es que maneja un guión bastante complicado, y consigue llevarlo a puerto, dejando en el espectador muy buenas sensaciones. Es algo de lo que se debe culpabilizar, sin duda, al buen hacer de ambos hermanos Coen, que destacan sobre todo en el manejo de los tiempos y en la calidad de muchos de sus diálogos. Hacen del film una interesantísima comedia que no baja el ritmo y entretiene por igual durante todo su metraje, generando sonoras carcajadas en muchísimas ocasiones.

Si por mi fuera, crearía una etiqueta para algunas películas, entre las que también se encontraría esta. Sería algo parecido a las de "No recomendad para menores de 16" y todas las de su familia, pero diría algo así como "Recomendación encarecida, película de obligado visionado". No la dejéis de ver.

viernes, 17 de octubre de 2008

Principio de Hanlon.

"Nunca le atribuya a la maldad lo que puede ser explicado por la estupidez".

Aunque según la Wikipedia eso de que fuera de algún Hanlon es bastante difuso, lo cierto es que esta frase viene a explicar muy bien como suelo pensar habitualmente. Y aun no tengo claro si eso es bueno o malo.

Pensar que la gente no actúa por malicia es, en principio, positivo. Te ayuda a confiar en otros y sobre todo te convierte en un ferviente creyente en la bondad del ser humano, lo cual se traslada y transmite a tus alrededores (ojalá). Es como una ola de amor o una granada de besos que explota en todas las direcciones. Love is in the air, everywhere you look around...
Sí, ya sé, una tremenda cursilada; no es mío. Se lo he robado a mi amigo el humorista, que acompañaba las palabras de gestos en plan osos amorosos...

Pero leches, pensar así no tiene nada de bueno. Basta profundizar mínimamente en la frase para darse cuenta de que, si se quiere creer en la bondad humana, no tienes más remedio que concluir que hay muchísima estupidez en el mundo. Y es un planteamiento misántropo y elitista (evidentemente, si uno es consciente de que el resto son idiotas es porque está por encima de ellos) con el que tampoco sé si debo estar de acuerdo... pese a que lo esté...

Mi problema es que, entre estupidez o malicia la disyuntiva es complicada. Por pura estadística, los inteligentes son los menos, lo cual redunda en la bondad del ser humano. Pero tampoco es fácil creer que tanta maldad como se ve por ahí sea mayoritariamente involuntaria.
No, tiendo a creer que en realidad hay unos pocos malos muy malos pero muy inteligentes, que son los que de verdad hacen la mayor cantidad de mal. Y que luego hay una masa enorme de idiotas inconscientes que actúan mal por puro error.


Es una idea terrible, pero posiblemente muy cercana a la verdad. Posiblemente, si eres suficientemente inteligente y suficientemente malo, acabes de presidente de algún gobierno, o dirigiendo una multinacional... Sea como sea, la cantidad de cosas mal hechas en el mundo vienen a superarme cada día más.

Me gustaría saber que opináis, y agradecería que alguien me hiciera ver que me equivoco. Pero es que en los últimos tiempos el mundo parece que rebota como una de esas bolas de goma dura que venían en las piñatas de cumpleaños, cuando eramos niños, cogiendo efectos increíbles al golpearse con el entorno.
Un día, una de esas pelotas te da en un ojo, y te quedas ciego, como decía una camiseta que me regaló uno de mis hermanos: "It's all fun and games until someone loses an eye" (no es la de la foto, pero vale como ejemplo).
Pero si te pasa a ti, dejas de jugar ¿no?. En nuestro mundo, las pelotas se lanzan cada vez más fuerte...

miércoles, 15 de octubre de 2008

Hoy cumplo 1 año.

Pues eso, que hoy este blog cumple un año de vida, así que, como tampoco está el mundo para muchas fiestas, he decidido honrarle al menos con un post de felicitación.
Y como no se me ocurren buenas formas de hacerlo, me voy a lanzar con algo parecido a ese clásico capítulo de las series de televisión norteamericanas en las que miran atrás y recuerdan sus mejores momentos, escogiendo los que consideran claves o especiales.

Así pues, voy a hacer un listado con mis posts favoritos, de los cerca de 250 que he escrito este año, para que queden agrupados de una forma accesible (he creado una etiqueta, 1er_aniversario, para poder verlos todos del tirón).
No será muy corta, porque son muchos meses y muchos escritos, ni siquiera serán todos los posts de los que estoy especialmente orgulloso, pero sí será una buena forma de recordar este año, y ver el tipo de cosas que me gusta mostrar en mi blog.
Os contaré que es lo que los hace especiales para mí, y espero que vosotros también os atreváis a darme vuestra opinión. Y por otro lado, si tenéis vuestro favorito particular y no aparece en la lista, espero que también me lo digáis, para hacerme una idea de vuestros gustos. Todas las opiniones será bien recibidas.

Siguiendo un orden cronológico, éste es mi listado de grandes éxitos:

- Física aplicada de los sentimientos (23-10-2007): Esta viene a ser algo así como mi miniteoría de la vida, y casi diría que todo lo que se sale de ella tiene poca importancia (para mí). Pero tiene un trasfondo científico que hace que la gente no la entienda, o se eche atrás al verla. Aun así, más por azar que por otros motivos, es de los posts más vistos de mi blog, pues su título suele entrar en otro tipo de búsquedas menos poéticas.

- David Hasselhoff (1-11-2007): Este post narra una historia real de un amigo mío, el humorista del que hablo de vez en cuando. Me encantó la anécdota cuando la conocí, y me pareció perfecta para el blog. Una de las cosas más divertidas que he oído jamás, aunque contada por mí pierda un poco...

- Un niño perdido (20-11-2007): Aunque os confesé hace unos días que últimamente leo muy poco, esta crítica literaria era absolutamente necesaria, y tiene tanto que ver conmigo que no podía dejar de mencionarla.

- El equilibrio inestable de la vida (25-11-2007): Otro post científico, uno que produjo una discusión en sus comentarios de lo más interesante (en la que, por cierto, me dieron algo de cera). Si no te interesa la biología y el tema ecológico, no irá contigo. Pero es el post más visitado de mi blog precisamente porque es un tema con mucho predicamento hoy en día.

- Venganza (11-12-2007): Una reivindicación personal irrenunciable, en tono de humor, eso sí. Poco más que decir. Leedlo y comulgad conmigo.

- Neotenia (7-1-2008): Otra revisión biológica a un término que generalmente la gente no conoce, pero que es fundamental a la hora de explicar muchas cuestiones embriológicas y evolutivas. Es más interesante de lo que parece al describirlo aquí, de verdad... y además da algunas claves de mis gustos más personales...

- La Luna (8-2-2008): Uno de esos escasos posts en los que saco parte de mi historia personal. Era el día apropiado para publicarlo, y es un post al que tengo mucho cariño.

- Asuntos de familia, Asuntos de familia II, Asuntos de familia III (8-4-2008, 18-4-2008 y 20-6-2008): Porque es parte de mi historia familiar, y me encantaron los vídeos y las cosas que aprendí al recopilar la información para escribirlos.

- Pavlov (28-4-2008): Otro de esos posts con los que intento mezclar ciencia y vivencias personales. Me gusta mucho el final...

- Fernández Míguel (23-5-2008): Aunque peque de onanista, este post habla más de mí que casi todo el resto de mi blog. Y aunque solo fuera por la foto, que me gusta especialmente, ya merecía estar en esta lista.

- Sinestesia (18-7-2008): El mes de julio hice un par de posts interesantes con bases científicas. En este caso hablo de la sinestesia, un fenómeno perceptivo que me parece fascinante. Echadle un vistazo si no la conocéis, os sorprenderá.

- Dalton e Ishihara (25-7-2008): Y el otro del mes de julio es éste, que aparte de ser científico cuenta una de mis características más curiosas. Estos últimos días es el más visitado, sorprendentemente.

- Nacionalismos y tecnofobias (31-7-2008): Un post un pelín largo, pero que entrelazaba un par de conceptos que me resultan muy interesantes, en ámbitos muy diferentes: la política y la tecnología.

- Etimología básica (23-9-2008): Este post lo escribí tras una conversación con uno de mis compañeros de trabajo, de la que salieron buena parte de las tonterías escritas. Es uno de los que más he disfrutado escribiendo porque me permitió dejar ir mi estúpido sentido del humor (muy pronto os pondré un post sobre él).


He procurado no hacer una lista muy larga, por si a algún despistado le apetece repasar alguna de las entradas mencionadas, que no se le haga muy largo.
Comprenden una parte de los escritos que más me definen, pero dejan fuera tres temas que toco con mucha frecuencia: cine, música y noticias periodísticas. Es deliberado, aunque habría posts que no me hubiese importado poner como favoritos. Pero por lo general suelen ser simples críticas o parodias y, para mi gusto, aportan cosas menos interesantes.
También veréis que hay un par de meses que paso por alto, como agosto, aunque curiosamente disfruté mucho escribiendo entonces y hay algunos posts humorísticos que me gustan bastante. Simplemente, no he encontrado un post que me parezca esencial en esas fechas.

Que disfrutéis. Espero vuestras opiniones.

lunes, 13 de octubre de 2008

Los Extraños

Mi madre es de esas personas que dicen que prefieren no ver una película de miedo porque no les gusta pasarlo mal. A mí en cambio, que me gustan sus sustos y angustias, me parece un razonamiento bastante simple, como si las películas de miedo fueran solo eso y no contaran además una historia.
Pero que queréis que os diga, en este caso creo que voy a tener que darle la razón...

No me entendáis mal, "Los Extraños" no me pareció mala ni buena, ni salí satisfecho o insatisfecho del cine. Sólo salí sin una idea muy clara de lo que había visto. O mejor, con una única idea clara: sufrimiento. Porque realmente eso es lo único que se nos propone y ese es el juego en el que se participa al ir a verla.

Al principio de la película se nos rellena un poco la historia, intentando presentar a unos personajes que en ningún momento quedan del todo definidos. Sabemos que han tenido una pelea, pero no se profundiza en los caracteres ni en su historia, y el único flashback explicativo que realiza la película queda como un añadido extraño que finalmente no aporta nada y deja al espectador con menos datos de los que partía.
Pero da igual. Los personajes de la película no son importantes, y de hecho desde el primer minuto de película ya sabemos exactamente que va a suceder con ellos. No como, pero si el resultado final. Y es ese como la aportación más positiva de una película que, al quedarse sin nada que contar, no dura más que 80 minutos.

Los actores están simplemente en su sitio, y si acaso cabe destacar que el director consigue transmitir muy bien la atmósfera de miedo. Y no os contaré más, porque contaros algo sería contar demasiado. Solo os diré que en esta película se cierran los ojos en muchos momentos, y que acierta al plantear que no entender que sucede es la clave absoluta para encauzar la angustia.

Dicho lo cual, concluyo que es totalmente desaconsejable para aquellos que crean que el cine está para pasarlo bien, pero muy recomendable para los que disfruten del terror.
DVD para la inmensa mayoría.

jueves, 9 de octubre de 2008

Apache.

El otro día uno de mis compañeros de trabajo tuvo una especie de regreso al pasado, y se acordó de una canción que sonaba en un capítulo de "El Principe de Bel Air".
Con la inestimable ayuda de Google y YouTube, consiguió encontrarla en apenas un par de minutos, y resultó ser "Apache (Jump on it!)", del grupo Sugarhill Gang (quizás les recodéis por el "Rapper's Delight", la canción que dio origen al "Aserejé" de las Ketchup).

El caso es que, aparte de una tribu india americana, "Apache" es una mítica canción instrumental de "The Shadows", que ha sido posteriormente multiversioneada y empleada como sampler, y que constituye una de esas melodías que están en el subconsciente de todos como la típica musiquita que se escucha cuando un grupo de vaqueros atraviesa el desierto con su caravana y observan como el viento arrastra rodando un arbusto desprendido. Y me decidí a encontrar una buena versión que poner en el blog.

Claro, la idea era hacer un post serio sobre una canción que, musicalmente, merece la pena. Pero buscando en YouTube di con una versión que se demostró imprescindible por sus propios valores estéticos. Y, visto lo visto, no he tenido más remedio que dar un giro a la historia para hacerla más acorde a la situación.

Yendo al grano, esta versión que os ofrezco es de un músico danés llamado Tommy Seebach, del que no sé nada, así que tendréis que acudir a su artículo de la Wikipedia si queréis información más seria de la que os voy a ofrecer (porque yo, tras ver el vídeo, directamente prefiero inventarme su carrera para terminar mi post a mi gusto).

Este tipo fue, evidentemente, un creador de altura que comprendió la fundamental relación que la música moderna ha tenido en toda corriente artística y social en los últimos años. Y, conocedor de que la creación de tendencias puede convertirte en un lucrativo mito viviente al que se recurra en todo tipo de circunstancias, creó un estilo nuevo: una moda hortera guachi-marchosa a la que, posteriormente, se apuntaron Valerio Lazarov (su nombre lo dice todo) y Alfonso Santiesteban (creador de las mejores sintonías televisivas de todos los tiempos, con el "Bla, bla, bla" a la cabeza) y que decidió denominar "kitsch", porque le gustaba el licor de cerezas pero no sabía pronunciarlo.
Su versión de "Apache" es, en ese sentido, una de las obras de arte más excelsas de la música de finales de los 70, y su vídeo marca la cumbre creativa del estilo, jamás superada.



En este vídeo podemos observar algunas de las grandes claves características del estilo, como la pose imitativa y tendenciosa, el empleo del mal gusto y su dudosa moral. Permitidme destacar sobre el resto la propia forma de moverse del señor Seebach (ese bracito amanerado), su gesto molón que parece decir "hey tío, soy guay y tu puedes serlo también", las bailarinas indias-años-20, frotonas y en bikini, y las risas degeneradas de fondo, todo ello perfectamente ambientado en uno de esos bosques centroeuropeos tan típicos del medio oeste americano.

Como entenderéis por mis palabras, es un vídeo de referencia, que marca un estilo y una época, y que no debéis dejar pasar bajo ningún concepto (sí, sé que muchos de vosotros preferís no ver los vídeos que pongo y solo me leéis de vez en cuando. Pero creedme, en este caso, merece los 5 minutos).

Disfrutadlo, yo lo he hecho ya varias veces.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Si bebes, no pilotes...

Hace un par de semanas salió la noticia: un par de pilotos se habían enfrascado en una pelea en Vigo, borrachos, y habían sido detenidos cinco horas antes de tripular un vuelo a Madrid.
La noticia llegaba con todo el mundo sensibilizado por el caso del accidente de Barajas, y enseguida se hizo hueco entre los diferentes diarios nacionales

Bueno, pues después de unos días por fin obtuvimos una conclusión definitiva para la historia, y el caso es que la noticia, pese a ser lo que se podía esperar, no deja de resultar chocante. Como es evidente, ambos pilotos han sido despedidos, tras no ser capaz el sindicato de pilotos (SEPLA) de proponer una solución alternativa para sus afiliados. Pero sus declaraciones tienen algo de miga...

Por lo visto, ambos pilotos, al ser identificados en la comisaría, intentaron quitarle hierro al asunto, aduciendo que esa era su forma habitual de arreglar divergencias. Pero parece que extraer soluciones antistress de "El Club de la Lucha" no está del todo bien visto, y se ha impuesto la cordura.
No digo que ellos no se queden a gusto y reconciliados después de haberse metido un buen par de leches, e igual es un buen método para recuperarse de una borrachera (no tengo datos, pero no lo recomiendo). Incluso es posible que les proporcione una dosis de relax necesaria para ejercer su profesión. Pero está claro que para los humildes pasajeros la idea de que su piloto y su copiloto puedan tener alguna diferencia en pleno vuelo que precise una solución rápida no es tranquilizadora. Y suponer que, en caso de que a estos les suceda cualquier cosa, un par de peleles hinchables tipo "Aterriza como puedas" va a tener que hacerse cargo del vuelo, hace que se desaten las alarmas.
Así que, como pasajero ocasional, y sintiéndolo mucho por las familias de este par de irresponsables, agradezco la medida...

Si he de ser sincero, me hace gracia imaginarme la escena de ambos pilotos enfrente de un agente de guardia, en la comisaria, contándole que eso lo hacen siempre que tienen problemas. Les veo a ambos abrazados, con una considerable moña encima y locución pastosa, asegurándole al agente que no pasaba nada, que eso era habitual. Y pidiéndole por favor que les dejara marchar, porque tenían que pilotar un avión en unas horas y no era cuestión de hacer esperar al pasaje... ahhh!!

Lo bueno de la noticia es que, si eres habitual de los vuelos entre Vigo y Madrid, ahora puedes volar mucho más tranquilo. Igual incluso has descubierto a que se debían esas turbulencias sobre la meseta en aquel día tan descubierto y sin nada de viento que volviste a Madrid después de unos días de visita a la familia gallega.
Pero lo malo es que este tipo de cosas siempre dejan un tufo que se expande en forma de mala fama entre el resto de pilotos, ya denostados en muchas ocasiones por sus irritantes huelgas y sus supuestas fiestas con azafatas, y es algo bastante injusto.


Nos cabe el consuelo de que, después de esto, Aviación Civil seguro que instaura controles de alcoholemia en pleno vuelo, para evitar males mayores, y que a partir de ahora las empresas pondrán mucho más cuidado. Y, al menos, al haber sucedido todo en tierra, podemos tomárnoslo con sentido del humor...

martes, 7 de octubre de 2008

REM en Las Ventas

El miércoles pasado tuve ocasión de ir con unos amigos a ver en concierto a uno de esos grupos que, indudablemente, serán recordados en el futuro por la calidad de su trabajo: REM.

Mi primer concierto en Las Ventas se cerró con una pequeña decepción por la mala calidad de los asientos de la plaza, por el no entender demasiado bien que las entradas más caras fueran tan lejanas y por no haber escuchado algunas de mis canciones favoritas del grupo. Pero la verdad es que por lo demás fue un concierto magnífico, con el grupo muy entregado y derrochando esfuerzos, con una presentación escénica y un juego de vídeos y luces muy efectivos, y con una calidad de sonido muy alta (si bien podía haber sido más potente para un sitio tan grande).

El concierto tuvo diferentes fases, bastante diferenciadas. Al principio, tocando varias de las canciones del último disco (del que, finalmente cantaron un total de seis canciones) y algunos otras más antiguas, pero no de las más conocidas. Estuvo bien y les sirvió para calentarse ellos y animar un poco al público, pero con todo el mundo esperando los grandes clásicos resultó demasiado frío. Eso sí, Michael Stipe sorprendió al mostrar porque sigue siendo un interprete de lujo y deleitándonos con una actuación física muy convincente. Pero por lo demás faltó entusiasmo.

Posteriormente, se centraron más en algunos de los viejos clásicos y la gente entró más en juego, animando el concierto. Fue una fase de música más rítmica, demostrando porque son el grupo de los movimientos rápidos de ojos, acelerada aunque un tanto plana. Y siguieron sin tocar sus canciones más famosas, por lo que se puede decir que el ambiente quedo simplemente caldeado.

Y por fin, tras salir a lo que parecía un descanso pero resulto ser el falso final de todo concierto, llegaron los bises, y con ellos la apoteosis. Porque golpearon con lo mejor de su último disco ("Supernatural, Superserious" y "Accelerate") y canciones míticas como "It's the end of the world as we know it", "Losing my religion" y, por encima de las demás, "Man on the moon" coreada por toda la plaza con fervor de fan. Y para terminar, el clásico de Iggy Pop "I wanna be your dog", una sorpresa que regalaron junto al grupo telonero acompañantes en su ya moribunda gira "We Are Scientists".

Fue un concierto estupendo, al que le faltaron un par de canciones para ser perfecto (eché mucho de menos "Stand", "Happy shinny people" y, sobre todo, "Everybody hurts"), pero un espectáculo al que espero poder acudir de nuevo algún día, cuando quiera que vuelvan por aquí. Una noche para recordar...

lunes, 6 de octubre de 2008

Tropic Thunder

Recuerdo haber visto "Reality Bites" hace unos cuantos años, cuando salió la película, más que nada porque por aquel entonces me gustaba mucho Winona Ryder, pero no recuerdo haber sacado muchas conclusiones de ella. Me gustó mucho su banda sonora, pero casi nada más. Aunque sí que es el primer recuerdo que tengo de Ben Stiller, director y actor en la película, y que, por lo que parece, en aquel entonces intentaba enfocarse hacia un mundo más serio.

Ya con "Un loco a domicilio" y con Jim Carrey de protagonista, Stiller renovó los éxitos humorísticos con los que se había iniciado en el mundo audiovisual (a través del "Saturday Night Live"). Y al año siguiente, haciendo el papel protagonista de "Algo pasa con Mary", se convirtió en alguien mundialmente famoso, y relanzó su carrera como uno de los actores cómicos más exitosos de Hollywood.

Como actor nunca me ha parecido nada muy especial, siempre con su gestito pegando los labios. Pero está claro que tiene vis cómica, y confieso que me he reído con él en muchas películas. Por otro lado, como director me gusta mucho más en sus obras más locas, y considero "Zoolander" una de las películas más estúpidamente divertidas que he visto jamás. Y en esta película que comento hoy, no solo ha hecho ambas cosas, sino que además ha compartido la tarea de guionista con Justin Theroux y con Etan Cohen (no confundir con uno de los hermanos Cohen). Dando un resultado muy interesante.

Aunque en un principio la película parece conducirnos hacia una historia más o menos bien formada, con un planteamiento muy interesante de ofrecer cine dentro del cine, lo cierto es que esa idea se abandona enseguida para quedarse con las gracias y las tonterías. "Tropic Thunder" es así, por encima de cualquier otra cosa, una muy divertida comedia de sketches. Concatena escenas absurdas y diálogos estúpidos uno detrás de otro, produciendo una de esas películas gamberras (en plan "Aterriza como puedas" o "Top Secret") que nunca te cansas de ver cuando la reponen en televisión (al menos no te cansas si eres de mente simple como un servidor). Pero la verdad es que los sketches son graciosos, funcionan, y la película, que podría ser un conjunto deslabazado de ideas, acaba siendo bastante efectiva.


Por otro lado, en todas esas escenas absurdas, y en el planteamiento general del film, subyace una parodia muy divertida hacia todo el mundo de Hollywood. Hay abundantes referencias a los excesos y locuras de un mundo más dominado por los intereses económicos que por el arte, y en los que existen algunas figuras exageradas que se convierten en los personajes protagonistas de la película. Personajes tópicos que se sacan de quicio para producir aun más efecto, pero cuyos inspiradores son fácilmente reconocibles, pues en ningún caso se intentan ocultar.

El plantel de actores cumple con su trabajo con mucha eficiencia, y cabe destacar el papelón de Robert Downey Junior haciendo de actor fiel al método convertido en un soldado negro. Así como el del propio Stiller, que ejerce su habitual ritual de caras y muecas para darle al personaje el necesario tono payaso. Jack Black hace de si mismo enganchado a las drogas, Jay Baruchel de joven e inexperto actor en busca de un sitio en la industria y Nick Nolte de fraude literario pseudo veterano de guerra, que intenta ser más listo que nadie para ganarse sus cuartos.
Y bajo el aspecto de un corpulento y agresivo productor de Hollywood aparece Tom Cruise, cumpliendo su venganza personal contra aquellos que más dificultades le han puesto en los últimos años.
Además son muy numerosos los cameos de actores muy conocidos que se interpretan a si mismos, dándole un mayor gancho al film, como en los magníficos trailers que dan inicio a la película (fundamentales, ni se os ocurra llegar tarde a la proyección) o en la ceremonia de los Oscar.

Como digo, una película muy divertida que enganchará a cualquiera que no encuentre demasiado estúpidas las parodias exageradas, con un plus de calidad en muchos sketches que harán las delicias de los adoradores del genero.
Muy recomendable para el cine, y perfecta para ver en vídeo con un grupo de amigos, sin temor a comentar en alto las idioteces más graciosas.

viernes, 3 de octubre de 2008

Leer.

Pues eso, que últimamente no leo un libro. Porque no encuentro tiempo. Porque me paso el tiempo o bien trabajando o bien viendo la TV, o bien escribiendo o bien leyendo.

Y esta presunta paradoja no es tal. Lo que pasa es que de un tiempo a esta parte lo único que leo son blogs, wikipedias, periódicos, información procesada y filtrada por internet...

He de confesar, aunque haya para quién sea triste, que tampoco lo echo en falta. No quiero engañar a nadie con un falso cultismo. Pero es que mis inquietudes me las cubren sobradamente las cosas que leo por internet. Y hace tiempo que ningún libro me llama la atención lo suficiente como para irme como un loco a leerlo.

Y tampoco voy a engañarme a mi mismo pensando que he perdido mucho y que tengo que recuperarlo. Sí es cierto que, cuando era un niño, luego un adolescente y luego un joven universitario, leía un montón de libros. No era el que más leía, pero superaba muy sobradamente la media nacional, y en mis buenos tiempos caía un libro por semana (media que subía en periodos vacacionales). Y leía tanto típicos best-sellers como obras reconocidas, sobre todo clásicos contemporáneos.
Pero hoy en día leo multitud de información que me nutre y me llena intelectualmente. Y puedo asegurar, sin ninguna duda, que mi consumo de malsana TV ha decrecido bastante desde que me tiro por la vía internet.

Así que si alguien echa de menos más críticas literarias en mi blog, aquí teneis la respuesta. Tengo alguna en mente, de algun clásico indispensable, y un par de libros que voy tocando de vez en cuando y que serán comentados cuando los termine. Pero hoy por hoy aun me queda bastante para publicar algo así (tengo varios borradores acumulados).

Ahora bien, como ya dije antes y como repite insistentemente Superlópez, "No fumes, lee" (aunque sea por internet).

jueves, 2 de octubre de 2008

Años 80.

"Graves catástrofes ambientales despiertan la conciencia sobre el valor del medio ambiente. La explosión demográfica continua. Surge la amenaza de una letal enfermedad de alcances imprevisibles, el SIDA. Crisis financieras, escándalos y nuevos magnicidios. Se extienden los usos de la tecnología informática. A fines de la década se inicia el colapso del comunismo, él que abrirá paso a la hegemonía de los EEUU.
Consumidos en fila.
Convencidos que creer en la riqueza alejará la pobreza.
We are not the world.
Democracia?
Pena de muerte, pena de vida.
Como una religión.
In the living room.
Hace falta una para los sofás de plástico y los colores.
No somos el mundo."





Hace unos años los de Pepsi sacaron una promoción por la que, coleccionando las anillas de sus latas, podías conseguir discos gratis. La oferta de discos no era la mejor del mundo, pero había uno que me apetecía conseguir y aproveche que en mi casa en aquel momento se tomaba Pepsi para juntar las suficientes y solicitarlo. Se trataba de "Fin de la primera parte", de Los Piratas, un recopilatorio de sus primeros discos en el que sobresalía "Promesas que no valen nada" ("... promesas que se perderán en estas cuatro paredes, como lágrimas en la lluvia, se irán...").

El disco me gustó sin excesos. Me convenció de lo que ya sabía, pero no me descubrió nada nuevo. Era simplemente un buen recopilatorio.
Pero consiguió que me interesara un poco por Los Piratas como grupo, y que les siguiera la pista después. Y lo que vino después fue un disco muy bueno titulado "Ultrasónica", que contenía canciones como la ya mostrada "Años 80" o "El equilibrio es imposible", acompañadas por un conjunto de canciones raras de letras íntimas y sonido áspero.

Después de aquel disco mi relación con Los Piratas ha sido muy escasa, tanto como grupo como con sus miembros por separado. Lo cierto es que me aburren un poquillo. Aun así, la primavera pasada me compré el último disco que ha publicado Iván Ferreiro, "Mentiroso, mentiroso", más por lo llamativo de la presentación (un libro disco hecho cómic en el que cada canción fue entregada a un dibujante diferente para que la convirtiera en imágenes a su gusto). Pero siguió sin convencerme del todo.

Eso sí, el Ultrasónica no falta en mi Ipod, y sigo escuchándolo de vez en cuando. Espero que os guste...

PD: El texto de inicio es el que acompaña al vídeo de "Años 80". Para aquellos que no piensen verlo...